jueves, 29 de agosto de 2019

EL ABUSO INFANTIL EN EL PROGRAMA "ENAMORÁNDONOS".

Por Elena Morado 

@Elena6Morado

Hace unos meses, hallé en You Tube una emisión del programa “Enamorándonos” el cual celebraba de una manera muy particular a los niños y niñas el 28 de abril del 2017: Siendo testigos de los conflictos, desacuerdos y malos entendidos de parejas juveniles. 


Y es que “Enamorándonos” se ha popularizado como un programa televisivo para evidenciar a los solteros que desean tener una relación de pareja. Desde luego, no sin antes, pasar por una selección que inicia con una sesión de preguntas y respuestas entre los interesados mientras los divide un muro. Después surge la oportunidad de conocerse y aceptar salidas que, regularmente, terminan mal. Ahora, quiero expresar mi opinión al respecto respondiendo ¿Qué hacen menores de aproximadamente 5 a 10 años ahí? Yo sabía que vería maltrato, humillación y desprecio a los “festejados”, pues con una idea mal ejecutada porque la planeación y el concepto del programa no van ni deberían estar enfocados a la presencia de niños y niñas.

Lo preocupante


Lo primero que llamó mi atención fue la manera impersonal de nombrar a los niños y niñas, ya que la conductora los señalaba como “Mini mi”, pues cada uno representaba a los concursantes con un disfraz de adulto como si fuera un ejemplo a seguir, digno de admiración. 


Debo añadir que la producción del programa, en algún momento, decidieron sacar a los menores de edad del set porque el porvenir de la grabación era delicado. Después, retomaron la dinámica cotidiana: Motivarlos a bailar reggaetón, a decir un diálogo disfrazado de improvisación, opinar sobre relaciones enfermizas. Por si fuera poco, algunas niñas lucían con minifaldas, extensiones de cabello, maquillaje y playeras ajustadas: Hipersexualización a la vista. 



¿Aún hay más? Sí, y es que en esta transmisión en vivo, a la producción del programa se le ocurre una dinámica que consiste en que una co-conductora introduzca bombones en la boca de una niña y, al mismo tiempo, ésta exprese una opinión con la boca llena de dulce. ¿Es innecesario que describa la humillación, sometimiento y desprecio a la dignidad de estas niñas? Tan sólo vean la próxima imagen:


Cabe resaltar que no hay instrucciones sólo expresiones imperativas: “¡A ver, abre la boca! ¡Empiecen a narrar!”. Lo importante para “Enamorándonos” es sacar adelante el juego sin considerar en lo más mínimo la duda y la amabilidad: por favor, gracias, ¿quieres hacerlo?

Lo inimaginable

“Nuestro amoroso se encariñó con… ¡Y sabremos si ella será la dueña de su corazón! ¡También conoceremos los detalles de la cita de…! Descúbralo en Enamorándonos”. Estas frases se pronunciaban mientras los infantes aplaudían y sonreían. Personalmente, el contenido me parece inapropiado en un programa que se autocalifica como “familiar”. ¿Qué mensajes predominan al mismo tiempo que se refuerzan?

1.- La invasión a la privacidad es correcta y está bien ser impertinente: Tanto la conductora como los espectadores del set cuestionan y critican la relación de “los amorosos”.

2.- El amor como forma de control y desconfianza: Las parejas que tenían citas (con cámaras y micrófonos encendidos) mostraban sus dificultades para seguir, pues se asomaban rasgos deshonestos y ruines.

3.- Palabras locales como: “bateados”, “portal” pronunciadas con énfasis por adultos. Creen que los niños y niñas no las entienden, pero los motivan a pronunciarlas (¿Quieren portal?). Y en efecto, algunos no las comprenderán, pero sí pueden resultar ambigüas provocando confusión.

4.- El hecho de definir la belleza y apreciación de la persona cuando se viste femenina, coqueta y a la moda. (Una de las niñas pasa al frente y la conductora insiste en calificarla como hermosa porque está disfrazada como la mujer que la acompaña).

5.- Mostrar sentimientos y opiniones respecto a una relación de pareja con la espera de obtener aceptación y popularidad.



Lo desastroso

martes, 13 de agosto de 2019

“ZOOLÓGICO”: UN LIBRO ÁLBUM PARA EXIGIR

Por Elena Morado 

@Elena6Morado

Cuando encontré en la librería “Zoológico” del inglés Anthony Browne pasó desapercibido, sin embargo, el destino quiso volver a ponerlo en mi camino y entendí la profundidad, belleza y desolación del mensaje: ¡Lo compré y quiero leerlo en todos los rincones del mundo! Sobre todo, cuando se trata de defender y dar voz a los animales que son abusados por el humano.


En mi canal de YouTube puedes descubrir un poco del contenido de este gran libro: 


¿De qué trata?

Acerca de una familia integrada por papá, mamá y sus 2 hijos varones que visitaron un zoológico ,estuvieron ansiosos por llegar inmediatamente a ver a los animales. Hubo tráfico, pero lo lograron. Papá mintió en la taquilla: Dice que sus hijos no aparentan la edad que se les ve (así el boleto puede tener un costo menor). No se salió con la suya. Y la familia empezó el recorrido del parque de animales, mientras los menores se metieron en problemas, el papá hizo comentarios hilarantes y mamá observó con detenimiento las escenas (igual que como miró las jaulas de los inocentes animales). 


Te comparto en mi canal de You Tube "Elena Morado" qué otros usos darle a este título: 



¿Quién lo escribió?

Anthony Browne es el autor e ilustrador de esta interesante historia. La mayoría de los títulos de este talentoso inglés están caracterizados por las bananas, sin embargo, he notado que en “Zoológico” estas frutas no protagonizan el cuento ¿Será por la temática cruel? No lo sé, pero esta observación predominó en mi sentir. Sí miras con claridad, hallarás otro homenaje a obras artísticas como “El hijo del hombre”, desde luego, con corbata de plátano. 

El boxeo y los monos son parte de la vida y de los libros del diseñador gráfico Browne, incluso las disputas y altercados eran representados con lápices y colores desde que era niño (vivió una latente competitividad con su hermano mayor a quien quería superar en todo). Y no dejó de ilustrar, pues antes de ser considerado uno de los artistas más influyentes de la literatura infantil, diseñaba tarjetas postales y de felicitación. Hoy su técnica a emplear es la acuarela y en entrevistas es tan honesto que admite odiar algunos de sus libros después de ser publicados, ya que encuentra varios defectos. Uno de sus sueños fue ser director de cine, eso justifica el uso de changos y alusión a King Kong. 


¿Por qué leerlo?

¡Es una joya! Creo que todos los lectores deberían leer, tomar y tener en su biblioteca personal un título como éste. Para mí fue muy simbólico el hecho de hacerlo mío hasta que lo hallé, por segunda ocasión, en una biblioteca escolar infantil para la que trabajaba. Es un libro atractivo desde las cubiertas de pasta dura y la ilustración tipo álbum familiar en la portada.

Creo que es un libro ideal para niños y niñas de 9 a 12 años (tampoco lo limito o prohíbo la lectura a niños más pequeños o a adultos), sin embargo, la temática es desgarradora: el maltrato que damos a los animales aunado al daño que ejercemos a nosotros como humanidad. Y es que pareciera que Browne ilustra a la perfección las consecuencias y trascendencia que tiene el secuestrar y esclavizar a otros seres vivos: Humanos que mienten, niños que pelean, familias que humillan y obligan a otro a hacer lo que no quieren. Eso es “Zoológico”. Y es que en este libro podemos evidenciar lo más primitivo y egoísta de nosotros los humanos. Por ello, lo recomiendo para la edad lectora mencionada con anterioridad porque será una invitación a cuestionar y cambiar a las ideas y actos que nos llevan a aprobar el uso y desecho de los animales como objetos de entretenimiento. Es alentar a la curiosidad, a la filosofía. 

Y si ya lo leíste, vuelve a hacerlo. En mi caso, no había encontrado una referencia a la pintura "El hijo del hombre". Seguramente hay otras más que ignoro ¡Vaya sorpresa! :D 


¿Qué me hará sentir?

Lo replanteo en plural ¿Qué nos hará sentir? Porque este título de portada tipo cebra es ideal para leerse en grupo, sentados en círculo, apretaditos e involucrándose en la contemplación de cada ilustración. Y es que donde veamos a los animales, nos veremos a nosotros. Somos un reflejo del daño y bien que hacemos para los otros. Como activista por los derechos de los animales, este título (para mí un arma o un escudo) me ha sido de gran utilidad para sensibilizar a mis estudiantes sobre el trato que damos a los animales no humanos porque de una forma muy estética y filosófica, los invito (y me invitan) a señalar, interpretar, dudar, representar, confirmar y contemplar la realidad, pues cada ilustración es un ejemplar idéntico de lo que hay en los zoológicos: soledad, miedo, angustia, aburrimiento, depresión y maltrato. Deseo que te haga sentir, sobre todo, empatía porque las palabras sobran (incluso escritas) pero las ilustraciones son desgarradoras. Y desde luego, gracias a la ambigüedad intencional en los desenlaces de los libros de Browne, seguramente te dejará con emociones indescifrables. 

NOTA: Todas las imágenes pertenecen a sus autores. 

Conoce a Anthony Browne: 



jueves, 1 de agosto de 2019

El niño y su mundo (Curiosidades de estudiantes) 4


Por Elena Morado

@Elena6Morado

4) En clase de baile sin música, estaba con un niño de 7 años que intenta persuadirme: ¿Podemos jugar Play Station unos 10 minutos? Fui firme en mi respuesta y le dije: No porque tu papá me pidió que estudiáramos juntos y no jugar videojuegos.
A punto de hacer berrinche, el nene contesta: ¡Ah, no es justo! Antes eras chévere.


FIN


DUENDE EN EL SIGLO XXI

  Por Elena Morado (cuento escrito en el seminario del escritor Luis Tellez en julio del 2021 con una de las muchas técnicas de creación l...